No recordarte.

                                               

  Entre tú y yo, ahora si que si,

puedo decir que no hay nada.
No queda el recuerdo de tu cuerpo desnudo
en mi mente ahora estas vestido de olvido.

El sueño sin empezar, de tus labios sobre los míos
termino con una pesadilla de bocas cerradas.
Las moscas se llevaron la azúcar y la miel,
de las noches de bodas no realizadas.

La luna decidió desvestir al sol,
y las nubes dejaron paso a los rayos uva del desengaño.
Me queme por no llevar la protección necesaria
y embarazada de mi tristeza y la tuya quede.

En estado en blanco me hallo,
pues mi perfil no es lo mismo sin fisgar en el tuyo.
Apesar de no haberte querido nunca
siempre te seguiré amando.